La magia del yoga clásico

El yoga es un camino y a la vez una meta. El yoga me asombra, me fascina porque tiene todos esos caminos todavia por recorrer y todos esos instantes vividos en su ruta.

El yoga es físico. El movimiento del cuerpo nos dá una serie de beneficios sobre nuestra parte material. Los dolores de espalda mejoran o desaparecen, las hormonas se equilibran, el peso se regula, las articulaciones rejuvencen, la piel misma rejuvence, la sangre y el oxigeno llegan a mas partes. Pero el yoga no es solo eso. Podemos llevarnos el yoga a una actividad física pero en realidad, los movimientos, las posturas de yoga, son para trabajar la energia. El cuerpo se mueve para ir abriendo los canales de energia que hay por todo el cuerpo. Estos canales se llaman Nadis.

El yoga es respiración. Movemos el cuerpo y mejoramos nuestra capacidad pulmonar para poder ser mas eficaces en cada respiración.

En el yoga, la mejora en la respiración es ademas de para captar mas oxígeno para mover el prana. Mover la energia vital por estos canales que hemos abierto con la práctica física.

El pranayama distribuye la energia o prana por los canales del cuerpo.

Existen nadis por todo el cuerpo pero los tres mas importantes están localizados en la columna vertebral. Dos de estos canales están conectados a las fosas nasales.

Cuando estos canales laterales IDA Y PINGALA se equilibran el canal central se despierta. Cuando shusuma se despierta la energia empieza a subir por todo su recorrido, desde la base de la columna hasta la parte mas alta de la cabeza. Durante este recorrido la energia se encuentra con ciertos estrechamientos producidos por Ida y Pingala que se entrelazan alrededor de shusuma, cuando estos chakras se abran y la energia ascienda hasta la coronilla encontraremos el estado de Shamadi o iluminación.

La práctica puede ir enfocada hacia un trabajo físico como tendemos a hacer en occidente pero el yoga en realidad, en su esencia, es un trabajo energético y espiritual.

Nos encontramos con yogas como el kundalini donde el trabajo es mas exclusivo de la energia o yogas físicos como iyengar donde la técnica se lleva gran parte de la sesión. Lo interesante es encontrar el equilibrio donde trabajemos y encontremos en nuestra sesión todos los elementos sin sesgarnos hacia ningún lado.

Desde este punto de vista, la práctica se hace con un maestro o guía para poder alcanzar el beneficio físico, la sanación emocional, el equilibrio mental y el despertar de la energía para llegar a un estado de plenitud y una vida plena.

Todo esto nos puede dar de sí una sesión.

Namasté.