Formación

Es curioso. Nos formamos para tantas cosas en la vida….para ser personas que encajen en la sociedad, para ejercer una profesión, para dar a luz a nuestros hijos….ponemos esfuerzo y dedicación para cosas muy importantes pero otras las dejamos, las abandonamos como si ellas mismas tuvieran que avanzar sin ningún esfuerzo por nuestra parte…como en el amor. Tras un tiempo inicial dejamos que la relación trabaje por sí misma y ponemos energía en otras cosas «importantes»de la vida. Pero no ponemos energía ni esfuerzo en nuestra relación y nos preguntamos que ha fallado cuando al cabo del tiempo no entendemos nada…

Quizá es como la sociedad nos tiene enfocados de manera materialista, si te aburres de tu coche o se queda anticuado te compras uno nuevo o una casa nueva….

En el mundo del amor, parece que el placer es lo mas importante, el sexo está inherente en la sociedad y esto nos impulsa a buscar una pareja nueva cuando la nuestra no «funciona» muy bien.

Yo siento que poniendo  un poco de esfuerzo y atención desde el interior las cosas pueden cambiar. Nuestra pareja nos gustó, por eso la elegimos(pudimos elegirla…) y el amor puede crecer, evolucionar y convertirse en algo profundo, interno, puro. Quizá las almas gemelas sean, no por suerte, sino por esfuerzo….quizá poniendo algo de nuestra parte tenemos a nuestra alma gemela a nuestro lado :-)…

 

Comentarios 1

  • Esta es una buena meditación, las relaciones amorosas en nuestra «civilización» suelen ser de las más largas e intensas (por la convivencia) que llegamos a experimentar y están en continua evolución… todo lo que opino del tema está bien explicado en el libro (que por ahora no he sido capaz de acabar… es un poco arduo, la verdad sea dicha… pero no por ello del todo recomendable) «Mujeres que corren con los lobos» de Clarissa Pinkola Estés. En el capítulo 5 y su cuento de «La mujer esqueleto».

    Princesa… ya casi no tenemos tiempo de hablar… de lo importante, no sé como no te recomendé este libro antes ( lo mismo ya lo has leído), es un ladrillo, pero un ladrillo interesante.